Y aquí tenemos un pudin que es muy sencillito y sobretodo nos sirve para aprovechar esas sobras que a veces tenemos de pan o restos de repostería que se nos quedan durillos... ;)
Ingredientes:
- Trozos de pan (pan duro o brioche, croassants, bizcochos...)
- 150 g de azúcar
- 4 huevos
- 1/2 l de leche entera
- 1 cucharada de canela o 1 rama de canela
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- la ralladura de 1 naranja
- 100 g de nueces
- 1 limón
Calentamos la leche a fuego medio hasta casi el punto de ebullición.
Bajamos la temperatura y retiramos del fuego, añadimos la piel de limón
la ralladura de naranja, la esencia de vainilla y por último la canela.
Dejamos todo a temperatura muy baja durante 5 min, retiramos del fuego y
dejamos reposar otros 5 min.
Colamos la leche y añadimos el pan cortado en rebanadas finas a la leche, removemos hasta que no empiece a ablandar.
Batimos los huevos con el azúcar y los introducimos a la mezcla anterior. Batimos todo hasta que quede una masa cremosa.
Untamos la base de un molde con caramelo.
Ponemos una bandeja con agua en el horno a 200º hasta que empiece a hervir.
Volcamos la crema de pudin que teniamos reposando en el molde de cake y
añadimos las nueces previamente enharinadas para que no se bajen al
fondo. Lo metemos en el horno unos 45-50 min. aproximadamente a 180º,
hasta que esté cuajado y dorado.
Si se tuesta mucho por arriba, le poneis un trocito de papel de aluminio. ;)
Después dejamos enfriar en la nevera y a la hora de servir lo desmoldais, ya vereis que cuando lo pongais en la mesa, dura un suspiro!! jejeje..
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